lunes, 2 de junio de 2014

Ciencia y Ética - El Escalofriante Proyecto MK Ultra

Fernando Velázquez Cervantes


El Escalofriante Proyecto MK Ultra

Hola a todos, buenas noches. Para esta publicación, quise hacer algo diferente. Decidí combinar aspectos de terror y casos extremadamente trascendentales que implican experimentar con seres humanos bajo condiciones fatales. Bueno, espero sea de su agrado y, aquí vamos.

Introducción

Proyecto MK Ultra. Una de las tantas crueldades creadas
por el hombre.
En varias obras, tales como películas, libros, historietas, programas de TV, etc., hemos sido testigos de cómo los monstruos y demás criaturas son capaces de hacer daño y crear el caos. Desde King Kong hasta Godzilla. Afortunadamente, todos ellos permanecen siendo ficción, por el momento. Pero, ¿Y si viéramos más allá y nos diéramos cuenta de que hay una especie de monstruo aun más diabólica y mortal que todas esas que aparecen en las películas? Y sobre todo, ¿qué no es ficticia? Si, indirectamente me estaba refiriendo a él, el hombre.

Las guerras nucleares, los ataques terroristas, los secuestros y los asesinatos son tan solo la punta del gigantesco iceberg de todo el mal que nosotros somos capaces de hacer a sangre fría. Sinceramente, habría que dividir esta publicación en numerosas partes si se quisiera hablar de todas y cada una de las atrocidades que el hombre ha hecho, pero por ahora, se hablará de una en particular. Una que es real y que ha cundido el terror entre civiles por más de dos décadas y que a la fecha, ha dejado mucho de qué hablar: el escalofriante proyecto MK Ultra.

¿Qué Es el MK Ultra?

En la Edad Medía, era habitual
castigar a todos los que se
 opusieran a Dios.
Durante la edad media, abundaba la necesidad de predicar con la palabra de Dios, nunca cuestionando su poder. Como era de esperarse, surgieron opositores que creían en fuerzas oscuras y macabras, a las cuales les rendían culto. Para evitar esto, se fueron desarrollando procedimientos de tortura especiales para desentrañar la verdad oculta por presos acusados por practicar brujería y magia negra. Estos procesos constaban de torturas extremadamente dolorosas que imponían a los torturados a confesar sus crímenes.

Es realmente irónico saber que en aquella época (la Edad Media) no se tenía un concepto tan sólido de la ética como el que se tiene hoy en día. Sin embargo, pareció inevitable el buscar un medio efectivo para resolver crímenes e impartir la justicia actualmente, sin importar lo atroz o poco ético que este fuera.
Allen Dulles
Todo empezó como una iniciativa iniciada en 1953 por el entonces director de la CIA, Allen Dulles, con el fin de obtener confesiones de sospechosos y presuntos culpables. Al igual que en las prácticas inquisidoras de la Edad Media, la iniciativa consistía en practicarles torturas tan dolorosas como el mismo infierno en la Tierra a los interrogados, para poder sacarles respuestas sin que ellos se negaran a darlas.

A medida que fue avanzando el proyecto en cuanto a efectividad, el insaciable apetitito de Dulles fue creciendo, lo cual lo animó a seguirle invirtiendo más y más cantidades colosales de dinero, pasando así de ser un simple método de confesión a ser algo más escalofriante y, claro, poco ético. Cabe destacar que criminales, agentes, soldados e incluso los mismos ciudadanos norteamericanos se vieron sumamente afectados por esta “innovadora” iniciativa.

El Comienzo Del Verdadero Horror

El control mental fue tan solo el primer paso para la nueva fase.
La nueva fase del proyecto consistía en la creación de sustancias psicoactivas multifuncionales. Pero en su totalidad, se empleaban para manipular y destrozar la mente de todo aquel que las consumiera. Obviamente, nadie se quería ofrecer como conejillo de indias, así que la CIA recurrió a civiles sin familiares en existencia, que se valieran por si solos y que nadie los fuera a extrañar tras sus desapariciones, tales como obreros, dueños de tiendas pequeñas, oficinistas, criminales, indigentes y universitarios (perfecto para aprovecharse de la situación y sacarle el mayor provecho). Ya con las “ratas de laboratorio” reunidas, se empezó a experimentar en ellas drogas capaces de dejar sin sentidos a la gente y revelar los secretos más íntimos de esta. El destino de las víctimas fue muy evidente: sus mentes colapsaron, sumergiéndose en un estado de locura total con tendencias maníaco-homicidas y hasta depresivo-suicidas.

Sometían a la gente a múltiples experimentos, haciéndola pasar
ratos de dolor y sufrimiento inimaginable.
No solo las sustancias tenían el poder de sacarle toda la sopa a los afectados y dejarlos como estúpidos, su poder iba más allá: Provocaban en la gente reacciones similares a una discapacidad mental, haciéndolos perder la capacidad de pensar y asimilar las cosas al momento de tomar decisiones con el fin de realizar acciones incoherentes e inapropiadas ante el público (Ideal para acabar con la imagen de algún político, estrella de cine, artista o cualquier otra persona). Incluso, podían borrar la memoria a largo plazo de cualquier individuo (Para poder interrogar o golpear a la gente y que horas más tarde, no pudiera recordar lo que pasó). Si bien, muchas de las drogas creadas tenían aspectos negativos, algunas tenían efectos contraproducentes, estimulando la atención y mejorando los reflejos de quien las consumiera (se empleaban para tener agentes más eficientes, más letales y más obedientes).

En fin, si pudiéramos hacer una comparación de todo esto, el concepto más adecuado sería el un teatro guiñol, en el Dulles sería el titiritero, controlando a sus marionetas (los civiles “conejillos”) a su antojo, indicándoles lo que tendrían que hacer y como lo tendrían que hacer. Todo eso sin que ellos renegaran o dudaran de los comandos de su amo. Así, Dulles desecharía a los que ya no le sirvieran y a los que demostraran ser útiles, los dejaría vivir por un tiempo más, pero que finalmente acabarían en un trágico final, sin aplausos del público.

…con las manos en la masa.

La joven cuya familia pidió respuestas al respecto.
Después de dos décadas de arduo trabajo e investigación, el proyecto seguía en pie, dando resultados muy fructíferos: Todo marchaba a la perfección. Todo pintaba muy bien, hasta que un día, por un diminuto descuido de la CIA, el New York Times publicó un escandaloso artículo en diciembre de 1974, 21 años después de haber iniciado con la masacre-proyecto. El artículo hablaba de una chica que había sido secuestrada para fines gubernamentales. Lo que alteró a la Agencia de Inteligencia Central  fue que esta muchacha tenía familia que pidió justicia por la joven desaparecida, lo cual incitó al gobierno a iniciar una investigación. Alterados, los integrantes de la institución dieron la orden de destruir todos los archivos relacionados con el proyecto, pero esto finalmente fue en vano, porque el FBI los atrapó con las manos en la masa.

Así, se dio fin a la pesadilla del MK Ultra, salvando el futuro de docenas de miles de personas. Lástima que todos los miles de seres formaron parte no pueda regresar a la vida por obvias razones, pero ojalá sepan que hubo justicia.

Conclusión

Se rumorea que existe una conspiración MK Ultra vigente,
la cual controla las mentes de los artistas, destrozándolos
lentamente...

Tras haber escrito este texto, me puse a reflexionar varias veces al respecto. Pensaba en toda esa gente que, solo porque no tenía seres a su lado, fueron los elegidos para sufrir un destino macabro y sanguinario. Y lo peor de todo, es que fue realizado por hombres que realmente estaban cuerdos y consientes de lo que hacían. Sinceramente, eso me aterró demasiado, pero también me aterró el pensar mucho en todas las atrocidades y maldades que todavía nos faltan por vivir…

A continuación, un link de la página del New York Times con el script completo de los planos del proyecto:

https://www.nytimes.com/packages/pdf/national/13inmate_ProjectMKULTRA.pdf

¡Gracias por su atención!


Próximamente, descubran los diabólicos orígenes del proyecto MK Ultra en:
"La Masacre del Sanguinario Escuadrón 731"

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